Las botas de agua han pasado de ser un artículo usado por su utilidad a ser además un complemento de moda. Para mantenerlas en perfecto estado y disfrutar de ellas durante mucho tiempo, hay que guardarlas bien limpias después de usarlas. Si no tienes muy claro cuál es la mejor forma de hacerlo, aquí os dejamos una guía sobre cómo limpiar tus botas de goma.
1. Lo primero es eliminar los restos de barro y de otro tipo de suciedad que puedan quedar adheridos a la bota. Para ello, con una bayeta húmeda vamos retirándolo con cuidado.
Si hay mucha suciedad, podemos usar un detergente neutro. Hay que tener cuidado con esto, para evitar que las botas pierdan brillo y color.
2. Secar con un trapo. Aunque las hayamos secado, antes de volver a guardarlas es conveniente dejarlas al aire un rato. Con ello evitaremos que quede humedad en las botas. Mejor dejarlas alejadas de cualquier fuente de calor, como pueda ser la calefacción. No hay que olvidar que están hechas con caucho, y el calor podría estropearlas.
3. Para evitar las manchas blancas,se debe usar un producto específico. Algunas marcas, como Hunter, venden el suyo propio. Pero si no lo encuentras fácilmente, una alternativa son los abrillantadores de neumáticos. La marca Kraft tiene uno por un precio asequible y que se encuentra en varias cadenas de hipermercados. Otro producto adecuado y que funciona muy bien es UV Tech, de McNett.
Esperamos que estos consejos os sirvan de ayuda y luzcáis vuestras botas como el primer día.