La vida más fácil

Hace vario años dejamos atrás los tiempos en los que el software de calidad, especialmente en lo que se refiere a ofimática, era software propietario. Poco a poco, programas como Openoffice, Libreoffice o Google docs nos han dado la posibilidad de crear documentos de calidad sin necesidad de gastar dinero. En este artículo presentamos dos programas gratuitos de edición de partituras equiparables a los conocidos Sibelius y Finale.

Entre la amplia oferta de editores de partituras que nos ofrece el mundo del software libre, encontramos dos especialmente bien cuidados. Los he elegido por su calidad y porque ofrecen a los usuarios dos conceptos diferentes y complementarios de edición.

Musescore.

Es un editor que dedica todo su esfuerzo a facilitar la vida al usuario final. Su filosofía es "lo que ves es lo que obtienes". Es decir, mientras editamos la música estamos viendo la partitura tal y como se verá en el resultado final.

Tenemos bastante libertad a la hora de mover los elementos gráficos sobre la partitura.

En Musescore es especialmente destacable el menú de acceso rápido a todos los elementos gráficos que tenemos a la izquierda de la partitura en todo momento.

El programa es muy amigable e intuitivo.

Lilypond.

Es un editor con vocación profesional.

Dedica todos sus esfuerzos a la obtención de un resultado elegante. Las opciones de este programa son infinitas. Podemos crear, colorear, eliminar, mover cualquier elemento sobre la partitura...

Lo que hace especial al Lilypond es que si no nos apetece maquetar los elementos de la partitura, el programa lo hace por sí mismo con un resultado que podría ser la envidia de cualquier editorial.

Como contrapartida, el entorno de creación de la partitura no es muy amigable: se crea a partir de un archivo de texto, al estilo "a4 b8( c) d4-. e-. a,2 r". Se han creado entornos de ayuda a la escritura, algunos de ellos gráficos, aunque estos últimos son de momento demasiado simples. Mejor juntos.

Ambos entornos cuentan con una buena guía de utilización y con una comunidad de usuarios siempre dispuesta a ayudar ante cualquier problema.

No puedo terminar sin hacer referencia la la posibilidad de utilizar lo mejor de cada uno de estos programas en una sola partitura, ya que Musescore puede exportar al formato Lilypond.